Black IPA

Si estás pensando en aventurarte en el mundo de la cerveza, déjame presentarte un estilo que te sorprenderá: la Black IPA. Este estilo combina lo mejor de dos mundos: la intensidad de una IPA y el carácter tostado de una cerveza negra. Prepárate para una experiencia de sabor única.

La Black IPA se caracteriza por su apariencia oscura y su sabor a lúpulo. Es una cerveza de alta fermentación que destaca por su equilibrio entre la malta y el lúpulo. Su cuerpo es medio y su espuma suele ser abundante y persistente. ¡Imagina una cerveza negra con espuma cremosa que te hace agua la boca!

¿Qué esperar de este estilo cervecero?

Si te preguntas cómo es una Black IPA en cuanto a color, cuerpo, espuma, aromas y sabores, aquí tienes la respuesta.

En cuanto a su color, como su nombre indica, es una cerveza negra, pero no te dejes engañar por su apariencia. A diferencia de una Stout o una Porter, su sabor es más lupulado y menos maltoso. Su cuerpo es medio, lo que la hace fácil de beber y refrescante.

La espuma de una Black IPA es un verdadero espectáculo. Suele ser abundante, cremosa y de color beige. La espuma se adhiere al vaso y crea un bonito contraste con el oscuro líquido de la cerveza.

En cuanto a los aromas, puedes esperar una combinación de notas tostadas, cítricas y resinosas. Los lúpulos utilizados en la elaboración de este estilo aportan aromas intensos y frescos que te transportarán a un bosque de pinos.

En cuanto a los sabores, prepárate para una explosión de contrastes. La Black IPA combina el amargor característico de una IPA con los matices tostados de una cerveza negra. Puedes esperar sabores a caramelo, café, chocolate, frutas tropicales y un toque herbal y cítrico. ¡Una verdadera fiesta para tu paladar!